Hoy es el último día (y quiero contarte algo personal)

De niña, en mi casa los conflictos no se gestionaban con calma.

Recuerdo cómo mi padre, al enfadarse, gritaba a mi hermana porque él no sabía autorregularse.

Yo, la pequeña, lo miraba todo en silencio… y lo que debía ser un hogar seguro para expresarse, muchas veces se convertía en un lugar de miedo.

Los límites se sobrepasaban constantemente (los suyos, no los nuestros) y yo crecí sin referentes claros de cómo manejar las emociones con serenidad.

Aprendí a evitar el conflicto

Confundí poner límites con firmeza a poner límites con violencia.

Acumulé emociones en mi cuerpo por miedo a no saber cómo expresarlas y gestionarlas.

Y es que nadie me enseñó a respirar para regularme.

Con los años entendí algo importante:

" Si no aprendemos a regularnos, los gritos sustituyen a las palabras, y el miedo sustituye al amor".

Hoy, como madre, no siempre lo hago perfecto (también me equivoco, sobre paso mis límites y a veces levanto la voz), sin embargo,  he visto en mi hija una gran diferencia:

Ella observa que su madre sabe parar, respirar y regularse antes de explotar.

Y eso cambia todo, como puedes ver en la foto, desde muy pequeñita empezó a descubrir los beneficios de saber respirar. 

Por eso te comparto esto hoy, porque me pregunto:

¿Tú tuviste referentes en tu infancia que supieran autorregularse?

¿Cómo habría cambiado tu vida si hubieras tenido esas herramientas antes?

La buena noticia es que nunca es tarde para aprenderlas.

La respiración consciente es la herramienta más sencilla y poderosa que tenemos para volver al centro, regularnos y transformar la manera en que respondemos a quienes amamos.

✨ En el curso El Arte de Respirar aprenderás técnicas fáciles y prácticas para:

✔️ Calmar tu mente en segundos,

✔️ Recuperar tu energía,

✔️ Romper el ciclo de gritos y culpa para vivir la maternidad con más serenidad.

📅 Y recuerda: hoy es el último día para acceder por 47 €.

Mañana este precio ya no estará disponible.